Vista aquí casi de canto, la galaxia espiral NGC 3079 está tan sólo a 50 millones de años luz de distancia en dirección a la constelación de la Osa Mayor. Mostrada en esta asombrosa imagen en falso color tomada por el Telescopio Espacial Hubble, el disco galáctico – compuesto de grupos de estrellas espectaculares formando sinuosos brazos espirales e impresionantes senderos de polvo oscuros – se extiende a lo largo de aproximadamente 70.000 años luz. Con todo, la característica que más llama la atención de NGC 3079, son las columnas de gas que destacan sobre un caldero de actividad cósmica que gira en el centro de la galaxia. En la ampliación insertada en la parte inferior derecha, se puede ver como las columnas se elevan a una altura de alrededor de 2.000 años luz y parecen yacer sobre la superficie de una inmensa burbuja que surge del núcleo de la galaxia. Las medidas tomadas indican que las columnas gaseosas están separándose del núcleo a 6 millones de kilómetros por hora. ¿De dónde surge la burbuja del caldero de esta galaxia? Los astrónomos están explorando la posibilidad de que la superburbuja se forme debido a los vientos de estrellas enormes. Si así fuera, estas enormes estrellas habrían nacido probablemente todas a la vez, a medida que el centro de la galaxia experimentó una explosión repentina de formación de estrellas.