Un retrato del Sistema Solar

En otro día de San Valentín (14 de febrero de 1990), navegando a cuatro mil millones del Sol, la nave Voyager 1 miró atrás para hacer este retrato de familia en primicia de nuestro Sistema Solar.

El retrato completo es un mosaico de 60 fotogramas hecho desde un punto de vista privilegiado a 32 grados por encima del plano de la eclíptica.

Los fotogramas de la cámara de gran angular del Voyager recorren el Sistema Solar interior (a la izquierda del todo) enlazando con el gigante gaseoso Neptuno, el planeta más externo del Sistema Solar por aquél entonces (usa la barra de desplazamiento hacia la derecha si fuera necesario).

Las posiciones de Venus, la Tierra, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno están indicados con sus nombres correspondientes mientras que el Sol es el punto brillante cerca del centro del círculo de fotogramas.

Los fotogramas insertados por cada planeta proceden de la cámara de ángulo estrecho del Voyager.

No se puede ver en el retrato a Mercurio, demasiado cercano al Sol para poder ser detectado, ni a Marte, oculto desafortunadamente por la luz del sol dispersada por el sistema óptico de la cámara.

La posición del pequeño y débil Plutón no se pudo cubrir.