El horizonte de Mercurio desde la MESSENGER
¿Qué se vería al rebasar a Mercurio volando? La nave espacial MESSENGER experimentó la semana pasada misma una aventura similar...
Mercurio , el planeta más interior, no sería seguramente una buena ubicación para unos Juegos Olímpicos de invierno interplanetarios . Pero los recientes resultados basados en los datos procedentes de la sonda MESSENGER, en órbita alrededor de Mercurio , indican que las regiones en sombra permanente que hay en los cráteres del polo norte contienen, efectivamente, cantidades considerables de hielo de agua.
Durante años se ha especulado con la posibilidad de existencia de hielo en Mercurio, inspirada por el descubrimiento de estas regiones cerca del polo norte altamente reflectantes en el radar.
En este mapa, basado en imágenes de la MESSENGER, se resaltan en amarillo las regiones brillantes el radar que se corresponden con las paredes de cráteres de impacto del polo norte. Más allá del polo, las regiones se concentran en las paredes de cráteres encaradas al norte.
La espectroscopia de neutrones de la MESSENGER y los modelos térmicos de los cráteres indican que el material de estas regiones tiene un contenido de hidrógeno consistente con el hielo de agua casi pura atrapado en una zona con temperaturas que permanecen por debajo de los 100 grados Kelvin (-173 º C). Como las circunstancias son similares a las de las sombras permanentes que hay en los cráteres de la Luna , se cree que la fuente del hielo de Mercurio son restos de impactos de cometas.