Este mapa topográfico lleno de colores de la Luna está centrado en la cara oculta, la cara no visible desde el planeta Tierra. Es la visión que tiene la sonda Lunar Reconnaissance Orbiter, ya que su cámara gran angular fotografía casi toda la superficie lunar cada mes.
La superposición estéreo de la imagen ha permitido el cálculo de los mapas topográficos con una cobertura de entre 80 grados de latitud norte y sur. Los resultados tienen una resolución de unos 300 metros sobre la superficie lunar y de 10 a 20 metros de precisión en cuanto a la altitud.
Los datos más cercanos a los polos norte y sur se llenan utilizando el altímetro láser de la sonda .
En este mapa, el blanco, el rojo, el verde y el púrpura representan altitudes cada vez más bajas. La gran mancha circular que tiende a tonos púrpura en la parte inferior es la Cuenca Aitken del polo sur de la cara oculta. De unos 2.500 kilómetros de diámetro y más de 12 kilómetros de profundidad, es una de las cuencas de impacto más grandes del Sistema Solar.