Es fácil perderse en la contemplación de la nube cósmica catalogada como NGC 281 y no fijarse en las estrellas del cúmulo abierto IC 1590. Sin embargo, al haberse formado dentro de la nebulosa, estas estrellas son la fuente del brillo nebular que impregna a esta nebulosa. Las atractivas formas que se aprecian en esta colorida imagen de NGC 281 son en realidad las siluetas de densas columnas y glóbulos de polvo, cuya forma se debe a la erosión causada por la intensa radiación y los vientos provenientes de las estrellas más calientes del cúmulo. Si sobreviven el tiempo suficiente, estas acumulaciones de polvo se convertirán en nuevos centros de creación de estrellas.
Denominada a veces la nebulosa Pacman (debido a su forma en vistas más amplias), la NGC 281 se encuentra a unos diez mil años-luz de distancia de nosotros en dirección a la constelación de Casiopea. La imagen de hoy es un mosaico obtenido con filtros de banda estrecha y muestra las emisiones de los átomos de hidrógeno, azufre, y oxígeno de la nebulosa en tonalidades verdes, rojas, y azules, respectivamente. Esta vista tiene un tamaño de unos 80 años-luz.