Algunas veces es de noche en el suelo pero de día en el aire.
Mientras que la Tierra gira para eclipsar el Sol, el atardecer se levanta desde el suelo.
Así pues, al atardecer en tierra, la luz solar todavía brilla en las nubes altas.
Bajo ciertas circunstancias, podemos ver una preciosa puesta solar, pero además unas inusuales nubes noctilucentes se mantienen tan alto que pueden ser vistas bien tras el anochecer.
En una tomada la semana pasada, una red de nubes noctilucentes arrojan un siniestro resplandor blanco tras el atardecer, más allá de los campos locales cerca de Potsdam , en Alemania.
Aunque se cree que las nubes noctilucentes están compuestas por unas pequeñas partículas cubiertas de hielo, se desconoce mucho sobre ellas.
Se han lanzado satélites para ayudar al estudio de estas nubes como el sueco Odin y el de la NASA AIM .
Pruebas recientes indican que al menos algunas nubes noctilucentes son resultado de la congelación del agua expulsada por Transbordadores Espaciales .