A veces, incluso el polvo oscuro del espacio interestelar tiene una serena belleza. Uno de estos lugares es la constelación de Taurus. La imagen muestra los filamentos que se encuentran en el cielo entre el cúmulo estelar de las Pléyades y la nebulosa California. Este polvo no es conocido por su resplandor sino por su absorción y opacidad. Se ven varias estrellas brillantes con su luz azul que se refleja del polvo marrón. También hay otras estrellas inusualmente rojas a medida que su luz llega a su máximo a través de un pilar de polvo oscuro, con el color rojo que queda después de que el azul se haya dispersado. Otras estrellas no se ven porque están detrás de gruesos pilares de polvo. Aunque parece serena, la escena es en realidad un bucle continuo de tumulto y renacimiento. Los nudos de gas y de polvo suficientemente masivos colapsarán gravitatoriamente para formar nuevas estrellas que crearán nueva polvo en sus atmósferas y destruirán el polvo antigua con su energética luz y sus vientos.