Vela solar

Hace casi 400 años el astrónomo Johannes Kepler observo las colas de los cometas azotadas por el viento solar y sugirió que estos cometas usaban sus colas para navegar por espacio.

Esta ya demostrado que efectivamente es el sol el que produce estas colas and a grandes, que podrían ser también la base de una propulsión para sondas.

De hecho, la ilustración de arriba representa un concepto que está estudiando la NASA centrado en desarrollar una sonda interestelar empujada por el Sol por una gran vela.

Con casi 500 metros de anchura, la delicada vela solar se desplegaría en el espacio.

La continúa fuerza de Sol podría acelerar a las naves a casa 5 veces la velocidad máxima que ahora se consigue con los cohetes convencionales, con el consiguente ahorro de combustible.

Si se lanza en el 2010, la sonda podría adelantar a la Voyager 1, la sonda más distante en el espacio estelar, y en el 2018 haber viajado tanto como lo ha hecho el Voyager en 41 años.