Pocas vistas astronómicas excitan la imaginación como lo hace el cercano yacimiento de estrellas conocido como Nebulosa de Orión.
El resplandeciente gas de la nebulosa rodea estrellas jóvenes y calientes en los confines de una inmensa nube molecular interestelar que se encuentra a tan sólo 1500 años luz de distancia.
La Gran Nebulosa de Orión puede verse a simple vista justo debajo y a la izquierda del fácilmente identificable cinturón de tres estrellas en la popular constelación de Orión.
La imagen de arriba del Telescopio Canadiense-franco-hawaiano de 3.6 metros (CFHT) en la cima del aletargado volcan en Hawaii nos enseña detalles de Orión de una forma espectacular.
En esta compleja nebulosidad están las brillantes estrellas del Trapecio en el corazón de Orión, los senderos de polvo oscuro que cruzan su centro, el dominante y rojizo gas de hidrógeno, y el polvo azulado que refleja la luz de las neonatas estrellas.
Todo el complejo de la Nebulosa de Orión, que incluye la Nebulosa Cabeza de Caballo, se irá dispersando lentamente en los próximos 100.000 años.