Dominando el tercio superior de África se encuentra la banda de terreno seco más grande de la Tierra: el desierto del Sáhara. A lo largo del Sáhara se extienden enormes áreas de arena y gravilla, mares de dunas de arena y montañas de roca estériles. Sin embargo, hace sólo 10.000 años la región estaba cubierta de verde y era rica en mamíferos como leones y elefantes. Ahora sólo el dos por ciento del Sáhara son oasis, zonas de terreno donde pueden crecer las cosechas y donde viven casi dos millones de personas. Los oasis están normalmente alrededor de manantiales naturales de agua. En la imagen de arriba a todo color vemos un terreno rocoso que se extiende unos 50 kilómetros, cerca del oasis Terkezi en Chad.