Todos los días la Tierra se ve golpeada por rocas del espacio. Sin embargo, cuanto más grande la roca, menos a menudo se ve glopeada la Tierra. Muchos kilogramos de polvo espacial repiquetean sobre la Tierra a diario. Los pedazos más grandes aparecen inicialmente como un meteorito brillante. Rocas y bolas de hielo del tamaño de una pelota de béisbol atraviesan nuestra atmósfera a diario y la mayoría se evapora rápidamente en nada. Existe una amenaza significativa en cuanto a rocas con cerca de 100 metros de diámetro, que golpean la Tierra aproximadamente cada 1000 años. Un objeto de este tamaño podría causar olas notables si cayese en el océano, con potencial para devastar incluso costas lejanas.
Una colisión contra un asteroide masivo, de más de 1 km de diámetro, es mucho más rara y ocurre por lo normal a intervalos de millones de años, pero podría tener consecuencias realmente globales.
Muchos asteroides permanecen sin descubrir. De hecho, la semana pasada se anunció el descubrimiento de varios; uno se muestra como el largo trazo azul en la fotografía de arriba.
Una colisión interplanetaria como esa afectaría al clima de la Tierra no tanto por cambios en su órbita sino por la cantidad de polvo que pondría en suspensión. Un resultado probable sería la extinción global de muchas especies vivientes, posiblemente haciendo pequeña la extinción que está sucediendo ahora.