Magallanes y su tripulación tuvieron tiempo en abundancia para estudiar los cielos del sur durante sus famosos viajes alrededor del mundo. Como resultado, dos objetos de los cielos del sur con forma de nubes borrosas se conocen ahora como las Nubes de Magallanes.
Estas nubes de estrellas son pequeñas galaxias irregulares, satélites de nuestra mayor galaxia espiral, la Vía Láctea.
La Gran Nube de Magallanes (LMC), fotografiada arriba, sólo está a unos 180.000 años luz de distancia; la única galaxia más cercana que se conoce es la enana de Sagitario.
Tanto la LMC como la Pequeña Nube de Magallanes (SMC) están unidas a la Vía Láctea por una corriente de hidrógeno frío cuyo origen es todavía controvertido.
Un raro efecto llamado de lente gravitacional ha sido recientemente detectado en unas pocas estrellas de la LMC, y se espera que pueda darnos importante información sobre la verdadera composición de nuestro universo.