Sol naranja chispeante
El Sol se ha convertido en un lugar muy concurrido. Hace tan sólo dos semanas, el Sol fue captado luciendo numerosas regiones...
¿De verdad es este nuestro Sol? Pues sí.
Incluso en un día normal, nuestro sol es una chispeante bola de hirviente gas.
De vez en cuando, se crean zonas con fortísimos campos magnéticos que se entrelazan entre sí, causando manchas solares y regiones activas, más brillantes.
La superficie solar hierve, mientras chorros de hidrógeno saltan siguiendo las líneas de los campos magnéticos.
Estas regiones activas conducen el gas por los lazos del campo magnético, y normalmente cae de vuelta a la superficie, pero en ocasiones escapa hacia la corona solar, o más afuera, hacia el espacio, formando así el viento solar.
En la foto superior se ve nuestro Sol en tres colores de luz ultravioleta.
Ya que solamente las regiones activas emiten cantidades apreciables de luz ultravioleta, la mayoría del Sol aparece oscuro en la foto.
En cambio, las regiones coloreadas brillan de manera espectacular, indiando así las zonas más calientes y violentas del Sol.
Aunque el Sol cambia constantemente, la cantidad de luz visible que emite ha sido relativamente constante durante los últimos 5.000 millones de años, permitiendo así que la vida pudiera surgir en la Tierra.