Calma, Luna creciente y Venus
La pasada semana, la Luna y Venus formaban una preciosa y arrimada pareja al oeste después de la puesta solar, una...
El pasado domingo, cuando la Luna era joven, la fase creciente iluminada por el Sol se encontraba al borde del horizonte occidental durante el ocaso. Bajo una intensa luz cenicienta, se reunió con un Saturno brillante configurando una bella conjunción visible para los observadores de nuestro planeta. En aquella noche serena, sobre una colina cerca de Veszprem (Hungría), una madre, una hija, el planeta luminoso y la joven Luna ponen en este tranquilo paisaje nocturno captado con un teleobjetivo. La Luna, sin embargo, envejece demasiado rápido para algunos, y anoche la parte iluminada por el Sol llegó al primer cuarto. Este fin de semana, los observadores del firmamento que pasen un tiempo disfrutando la Luna y las estrellas podrán contemplar la lluvia anual de polvo de cometa conocida como la lluvia de meteoritos de las Leónidas.