Esto es NGC 1818, un jóven y precioso cúmulo de más de 20.000 estrellas que reside en la Gran Nube de Magallanes, a 180.000 años luz de distancia. Elige una estrella. Cualquiera.
Los astronómos han elegido esa pequeña y blanca estrella rodeada por un circulo que parece ser una caliente y nueva estrella enana blanca en formación.
¿Qué la hace tan interesante?
La sabiduría clásica astronómica sugiere que las estrellas 5 veces más masivas que el Sol rápidamente gastan su combustible nuclear y terminan sus vidas en una espectacular explosión supernova.
Con menos masa que esto la masa crítica evoluciona en gigantes rojas, pasando por una relativa y pacífica fase de nebulosa planetaria, y tranquilamente se desvanecen en estrellas enanas blancas como esta.
Excepto que es un miembro más de NGC 1818, esta enana blanca habría evolucionado de una gigante roja de unas 7.6 veces la masa solar, con lo que debería haber explotado.
Su descubrimiento forzará a los astronómos a revisar el límite de masa que estima la creación de una supernova.